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martes, 22 de marzo de 2016

Perspectivas para el 2016(Marzo 2016)

La encrucijada económica del país está lejos de resolverse. Al término de 2015 Venezuela habrá consumado uno de los peores años en su historia económica, pero las proyecciones para 2016 son aún más desalentadoras.Más inflación,se agudiza la recesión, mayor depreciación del poder adquisitivo, recorte de importaciones y desabastecimiento son algunos de los ingredientes que guiarán el rumbo económico el próximo año, 

¿A cuánto llegará la inflación?

El piso de la inflación para el próximo año será de 300% y en un escenario de “crisis política” podría, incluso, llegar a 800%. “Si tienes escenario de estatus qui, es decir, Maduro sigue prácticamente sin mayores cambios en la política económica podemos tener una inflación en torno al 300% (…) Si tienes un escenario de quiebra institucional, de crisis política, de 800%” de inflacion. y sólo se posibilidad de un freno en el ritmo con que suben los precios si el Gobierno se decide a tomar correctivos como una “convergencia cambiaría” o el “desmontaje del control de cambio”.

¿Habrá de valuación?

El Gobierno se verá obligado a devaluar nuevamente la moneda. Aunque  se apunta que en el Gobierno “no hay consenso de cómo construir un ajuste cambiario” y “resistencia” a mover el cambio de 6,30 bolívares por dólar, lo más factible es que en 2016 haya una de valuación.
Los dos escenarios más probables son: un esquema dual con un tipo de cambio en Cencoex de 25 bolívares por dólar y el Simadi entre 200 y 220 bolívares por dólar; El otro escenario sería mantener las tres tasas, pero en 15 bolívares por dólar en el Cencoex, 25 la del Sicad y 200 la del Simadi. “Eso no resuelve los desequilibrios, pero sí le da un oxígeno al Gobierno en términos fiscales importante (…) Desde el punto de vista de resolver el problema de recesión del país, de escasez, desabastecimiento, divisas para el sector privado no es suficiente, pero sí le da oxígeno al Gobierno”, 

¿Seguirá subiendo el dólar paralelo?

“En la medida que no se haga nada, sigue subiendo”,cada vez es mayor la cantidad de productos cuyos precios están “indexados” al dólar paralelo, razón por la cual tiene un efecto inflacionario. “Cada vez que el dólar paralelo sube hay un efecto en la inflación porque hay una cantidad de productos indexados a ese dólar”, 

¿De cuánto será la contracción de la economía?

 En Venezuela se proyecta un desplome del Producto Interno Bruto (PIB) que oscilará entre 6,8% y 12,3%. Con esa contracción el país sumaría tres años seguidos de retroceso entre 2014 y 2016. Extraoficialmente el retroceso de 2014 fue de 4% y el de 2015 será de 9,2%,  según proyecta .

¿A cuánto se cotizará el petróleo venezolano?

El precio promedio de la cesta petrolera venezolana para el próximo rondará los 50 dólares el barril. “En la medida que la cesta se te deteriore o sea más baja el déficit sube más o menos en promedio unos 600 millones de dólares”.

¿Tendrá suficientes recursos en dólares el Gobierno?

Con ese supuesto del petróleo venezolano a 50 dólares el barril, los cálculos indican que el Gobierno tendrá un déficit en su flujo de caja en dólares cercano a 15 mil millones de dólares. De ese total, sólo unos 10 mil millones de dólares se podrían cubrir con algunos activos y operaciones de canje de oro, entre otras opciones. “¿Estará China dispuesta a dar ese soporte o más bien va a ser conservador y sólo va a dar la renovación del tramo C que se vence el próximo año? China te presta 5 mil millones adicionales prácticamente el Gobierno puede cerrar el déficit pero en un entorno político institucional más complejo que el que tienes en 2015”

¿Pagará Venezuela la deuda externa?

“No me preocupa, el momento tenso de pago de deuda externa del próximo año es octubre-noviembre, que es una concentración importante, pero creo que antes de llegar allí van a ocurrir cosas en Venezuela. Creo que antes de preocuparnos por la deuda externa vamos a tener que preocuparnos por el tema político institucional que va a estar seriamente afectado”,

¿Qué pasará con las importaciones?

Los escenarios probables apuntan a una caída general de las importaciones de entre 15% y 26,3%.  “Para 2016 el escenario de recorte de importaciones se mantiene en 15% las importaciones totales, pero con el esquema actual: sigo recortando importaciones privadas pero mantengo las importaciones públicas o las incremento (…) Pareciera que se han radicalizado y están dispuestos a ir mucho más allá, no es descabellado pensar que el próximo año tengamos un nivel de importaciones públicas superior al 60% (del total), un mayor control del comercio exterior”, 

¿Se acabarán las colas?

En un escenario de contracción económica y mayor restricción a las importaciones privadas, difícilmente mejorará la oferta de productos en el mercado. Se cree que esa estrategia es un ajuste “ineficiente e incompleto” que no resuelve los problemas de fondo. “Sin reformas no tienes divisas para atender todas las necesidades del país”,.

miércoles, 13 de agosto de 2014

La Violencia como medio de lucha Julio 2014

No se puede entender el problema de la violencia política sin conceptuar a la política como la organización y aplicación sistemática de determinadas relaciones de poder, como la articulación de un conjunto de medios para la consecución y la preservación de éste. La política organiza el poder, le otorga forma estatal y viabiliza un proyecto socio-económico de clase. En este marco, la violencia es parte activa de la estructura social, no es sólo un instrumento o medio de lucha, sino sobre todo un modo de conflicto.
El surgimiento de la violencia política está estrechamente vinculado al desarrollo de la propiedad privada, y es sólo en el transcurso de la consolidación histórica de ésta, que la violencia se transforma en manifestación específica de poder social. En otras palabras, posee una base material concreta y no es una constante histórica, por lo tanto es factible su desaparición en una fase superior del desarrollo humano, cuando sea eliminado todo tipo de explotación pues -como señalara Engels- "el poder, la violencia, no es más que el medio, mientras que la ventaja económica es el fin" (1).
Cuando la ventaja económica, la ganancia, deje de ser la principal motivación de la producción material, cuando el fin de la actividad económica sea la satisfacción de las necesidades del hombre, y no el mero lucro, allí se crearán las condiciones básicas para la extinción definitiva de la violencia política.
No obstante, esta posibilidad histórica se vislumbra lejana, y la violencia continúa siendo componente central de todo el sistema de dominación. De allí que la clase en el poder requiera -a todo nivel- de estructuras que le permitan organizar el control social, minimizar los riesgos de un cuestionamiento revolucionario de la sociedad, y garantizar las condiciones para la reproducción ampliada del poder y del sistema en su conjunto. En esto el Estado desempeña un rol crucial.
El principal organizador y concentrador de la violencia estructural es el Estado, de manera que cualquier intento por legitimar y justificar la violencia ejercida por la clase en el poder, pasa por legitimar el Estado. El objetivo básico que se persigue es despolitizar, desideologizar y neutralizar el Estado, presentarlo como el sintetizador del "bien común" y garante de la "ley y el orden". Para ello es imperativo la imposición de una visión histórica de la naturaleza humana, la sociedad y elaborando, simultáneamente, conceptos abstractos de nación, interés nacional, estabilidad y paz social.
Este tipo de Estado se justificaría por el posible "caos" que devendría en la sociedad humana por el hecho de su inexistencia. Fenómeno que hace más de tres siglos ya debatían los grandes pensadores filósofos y políticos. Según esta corriente teórica -que de una u otra forma sigue vigente- la naturaleza humana es esencialmente egoísta y utilitaria, cada ser lucha por su propia subsistencia, por la satisfacción de sus propios intereses, lo que inevitablemente le lleva a la confrontación permanente con otros seres humanos. Esta situación es la que Hobbes (2) describiera como "la guerra de todos contra todos". Situación superable sólo con apego a un ente no-utilitario, a un órgano que no buscase la satisfacción de intereses particulares, sino que comunes, generales. De allí surge la noción básica y la materialización del concepto del Estado actual como el único capaz de imponer el orden en medio del "caos natural". Es decir, ser un "administrador neutro del conflicto social".
Dicha tesis amerita al menos dos consideraciones. En primer lugar, la naturaleza humana no es egoísta, ni altruista, ni agresiva ni pacífica, ni buena ni mala en si misma, sino que simplemente sintetiza el sistema de relaciones sociales prevaleciente en un momento histórico determinado. La esencia humana en abstracto no existe, esta es concreta y, por sobre todo, dinámica, cambiante, de modo que la hipótesis de una situación natural de guerra permanente solo sirve para justificar la creación y consolidación de un complejo aparato de dominación de clase como es el Estado (analícese, en un grado menor, la lucha contra la delincuencia), además de proyectar la idea de la imposibilidad de transformar el sistema o luchar por una sociedad igualitaria, puesto que el ser humano sería individualista y egoísta en esencia y jamás podría cambiar.
En segundo lugar, es necesario puntualizar que el Estado no es un ente que esté por sobre las clases y la sociedad. Ninguna institución es neutra o poseedora de poder propio, más bien expresa poder social de clase. Es por ello que conceptos y prácticas tales como orden, legalidad, estabilidad, paz social, civilismo, etc., son de carácter tan determinado; la sociedad virtual no existe, ni ha existido, solo existe la sociedad históricamente concreta, de manera que el orden y la estabilidad que se defiende hoy, es el orden y la estabilidad del neoliberalismo. El Estado no es ningún sintetizador del bien común y del interés de un país, sino que de violencia política y, por consiguiente, de poder de un sector de la sociedad sobre otro.

jueves, 12 de junio de 2014

LA PROTESTA NO VIOLENTA COMO MEDIO DE LUCHA(JUNIO/2014)

Aunque las experiencias históricas sobre la resistencia no violenta son tan antiguas como las sociedades humanas, la resistencia no violenta moderna se debe a la experiencia del movimiento de independencia indio y las enseñanzas de Gandhi (que él designaba satyagraha) quien a su vez se inspiró en Leo Tolstoi y Henry D. Thoreau, y básicamente comprendería algunos de estos elementos en el proceso:6
  • resistencia ética, moral, religiosa, ideológica (originalmente la 'no-resistencia', no resistirse al mal causando injusticia).
  • Intentar la Negociación e incluso el arbitraje
  • Preparación, entrenamiento y concienciación del grupo (rebelde) para la acción directa
  • Agitación y peticiones concretas de cambio y transformación del régimen o sistema político-social
  • Emisión de un ultimátum (dirigido al oponente u opresor)
  • Medidas de Boicoteo económico y medidas de huelga
  • No cooperación o no colaboración política (por ejemplo con las autoridades)
  • Formas de acción directa o intervención noviolenta como la Desobediencia civil
  • Creación de instituciones paralelas (como la usurpación de las funciones de gobierno)
  • Desafío total con la creación de un Gobierno paralelo
Estas medidas Gandhi las aplicó y dirigió durante las acciones por la independencia de la India del poder imperial británico.7 Las mismas han sido modificadas por otros dirigentes pacifistas que usaron la no violencia activa y la desobediencia civil como métodos para lograr cambios en sus sociedades. Cada lucha particular, en la historia, ha cobrado sus propias características y formas, pero todas siguen en gran medida las enseñanzas de Gandhi sobre la no violencia activa. La aplicación de este método implica ventajas y limitaciones que requieren un estudio profundo del mismo.

viernes, 2 de mayo de 2014

SIGUE LA INTOLERANCIA POLITICA EN VENEZUELA(MAYO/2014)

La tolerancia como virtud cívica y como valor ético sigue traspapelada en el ambiente político venezolano. Parece irrealizable lograr ese consenso mínimo, indispensable para que la aun llamada democracia funcione civilizadamente; la coexistencia pacífica, en medio de las diferencias,  sigue siendo una materia pendiente porque históricamente ha prevalecido la intolerancia como práctica política desfavorable y negativa.
De ahí han surgido los radicalismos y la larga  confrontación.El diálogo constructivo entre contrarios no ha sido posible y parece que no bastan las muertes y asesinatos para entender y aceptar que el único camino hacia la paz pasa por la tolerancia y el debate civilizado e ilustrado. La cultura de la paz sólo es posible en una sociedad tolerante, comprensiva y flexible, caracterizada por la diversidad ideológica y cultural.
Tolerar es aceptar la pluralidad en todos sus campos y expresiones. Es respetar las ideas, visiones, credos y prácticas de los demás, aunque difieran de los propios, siempre y cuando todas se ajusten a los principios, valores e instituciones sobre los cuales se sustenta una verdadera democracia.
La tolerancia, junto a la justicia, la libertad, la igualdad ante la ley, la participación ciudadana y la soberanía popular  son pilares sobre los que debe sostenerse todo régimen democrático.
Obviamente no hay que confundir la tolerancia con la indiferencia ni con la permisividad ante posiciones o prácticas socialmente perjudiciales. La diversidad, la heterogeneidad, las diferencias y la pluralidad, son, desde todo punto de vista, enriquecedores y vitales porque generan interacciones, cambios, transformaciones y dinamizan los procesos sociales.
La homogeneidad absoluta no es posible y sería un freno al desarrollo. La tolerancia debería ser un compromiso de todos los venezolanos, de los ciudadanos afectos al régimen y los disidentes a él, de las comunidades y desde luego del Estado.
Venezuela es un país multicultural, diverso y variado. Costeños, andinos, larenses, maracuchos, centrales, llaneros, guayaneses, orientales, margariteños, tenemos distintas maneras de actuar y de expresarnos y dentro de esa diversidad se dan también las diferentes visiones del mundo y de las cosas y a partir de ahí surgen las ideologías contrarias como algo consustancial a la verdadera democracia.
Es así en todo el mundo. Ninguna sociedad es homogénea. En Suecia por ejemplo, conviven en paz y armonía 8.5 millones de suecos nativos y un millón de exiliados e inmigrantes provenientes de los más variados países. Existen siete partidos políticos sólidamente establecidos, soportados en una amplísima gama ideológica que va desde la izquierda ortodoxa hasta la ultraderecha xenófoba. En los procesos electorales cada debate televisivo es una cátedra de tolerancia y de democracia.
En Venezuela,gobierno y oposición no se reconoce como adversarios políticos sino como enemigos irreconciliables y cada uno señala al otro como único responsable del problema. No se permite el disenso, la obstinación y el sectarismo es eliminar al contrario a costa de lo que sea.
La hostilidad se exacerba permanentemente y copa todos los escenarios donde deberían reinar el diálogo y la conversación constructiva. El insulto, el agravio y la ofensa marcan un estilo practicado afianzado por el verbo incendiario, burlesco, jocoso y permanente de los políticos..
La discriminación se ha disparado también. Todas las censuras comienzan con expresiones descalificadores, las críticas contra cualquier desempeño han estado siempre marcadas por el odio, la rabia, la envidia y hasta el color de piel. En un país cargado de rico mestizaje hay quienes se creen arios o caucásicos.
Tanta intolerancia atenta contra el derecho a la vida,  crispa los ánimos y acentúa la confrontación; las amenazas contra líderes populares, políticos, sindicalistas, periodistas son intensas. Muchos hombres y mujeres corren, en serio, el riesgo de ser liquidados por bandas criminales  con nuevos nombres, anuncian que “tienen la orden de encarcelar o liquidar” a dirigentes y a miembros de organizaciones de mujeres y de defensores de derechos humanos; a todos los acusan de manejar un discurso político.
Mientras tanto, nosotros, usted y yo amigo lector los que no somos violentos, unamos voces de paz y de reconciliación a Dios y  y soñemos con una Venezuela donde quepamos todos y donde prevalezcan la convivencia, la unidad, la paz, la solidaridad, la tolerancia y la justicia social.



viernes, 4 de abril de 2014

LA INTOLERANCIA POLITICA EN VENEZUELA(ABRIL/2014)

Se aplicarán a la realidad para generar proposiciones innovadoras acerca de la intolerancia política acaecida en Venezuela. Permitiendo así, poder ofrecer mediante el aporte teórico una visión de las consecuencias de la intolerancia política mediante ejemplo de otros países.
Igualmente, servirá de punto de partida o referencia para aquellos investigadores que se interesan por los temas de política.
Así como para el diseño de modelos de consulta de opinión política.Beneficiará al colectivo en general, pero en especial a los líderes políticos, periodistas, y gerentes de medios, para manejar de una forma óptima la Intolerancia que se genera a diario entre las tendencias políticas y partidistas que convergen en Venezuela.
De esta manera, se justifica esta investigación desde el punto de vista práctico porque colaborará con el problema de la intolerancia política en el ejercicio periodístico, ofreciendo recomendaciones para poder manejar la intolerancia y así realizar un trabajo efectivo dentro de cada periódico venezolano; permitiendo además, la variedad de opiniones sin hostilidad y equilibrad amente al igual que para los líderes políticos del país. 
Esta problemática es la mayor dificultad que pudiese estar enfrentando Venezuela debido a lo degradante e irrespetuoso y hasta peligroso que se ha convertido expresar opiniones distintas en el debate diario sobre política.
 Regularmente, los medios de comunicación nacional e internacional evidencian como las diferentes inclinaciones políticas que existen en Venezuela han cargado sus discursos de amenazas, odio, y una gran cantidad de negatividad cuando deciden expresar sus opiniones.
Aunado a esta situación, el ejercicio periodístico venezolano, formando parte activa de la sociedad, se socava a medida que transcurre la intolerancia en el país, ya que los dueños de medios han tomado el protagonismo dentro del debate político y le han otorgado una marcada polarización a la situación, contrayendo de esta manera una serie de responsabilidades a los periodistas que laboran dentro de esos medios al igual que las restricciones y auto censura que se han inducido a través de las políticas para obligarlos a tener una postura a favor de las acciones del gobierno venezolano. Dividiendo así, a la sociedad en varias tendencias políticas, olvidándose de lo que realmente tiene que hacer el periodista que es “informar veraz y oportunamente”.
De la misma manera, se observan las limitaciones para el acceso de la información que están en poder de los líderes de las tendencias políticas, la polarización de los medios sobre todo en el medio impreso, donde se denota la amplia cobertura de las informaciones partidistas de las diferentes preferencias a las que se encuentra sometido el medio. Otra marcada característica de este tema es el difícil acceso que mantienen los voceros políticos cuando manejan información perteneciente a sus quehaceres diarios dentro de la vida política. Se observa igualmente como se sesga las informaciones por parte de los periodistas polarizados en el tema.
Desde periodos muy antiguos la tolerancia se posiciona como la característica positiva que permite el entendimiento y la aceptación de los otros individuos, por ello se considera como el elemento que se debe salvar dentro de toda sociedad para que exista una verdadera democracia, respetando de esta manera el desarrollo de todos los individuos que la integran y su participación activa.
 Las ideologías del “más fuerte” llamadas también las del “pensamiento único” han existido desde siempre, destacando como el inicio de la intolerancia más violenta y con más consecuencias para la humanidad que ha vivido el mundo, son las que han sido representadas por los países que han seguido el pensamiento nazi y el comunismo. Tal como lo explica Cisne ros (2001), ambas corrientes totalizaron la política, y no titubearon en aniquilar a todo aquel que consideraban oposición o enemigo a través de la sistematización del terror y una política de largo aliento orientada a la persecución.
 

jueves, 6 de marzo de 2014

LA PROTESTA PACIFICA COMO LUCHA CIVIL(MARZO/2014)

La extrema complejidad del desenvolvimiento de la sociedad venezolana impone detenerse a observar algunos aspectos que tienen relación directa con el sector estudiantil y su vinculación con otros sectores sociales.
Nos ubicamos en el contexto actual de intensa movilización opositora, a partir de la convocatoria de la marcha de los jóvenes estudiantes con motivo del día de la Juventud - 12 de Febrero-. Nos referimos a la convocada por los jóvenes; que además atrajo un volumen considerable de participantes más allá de los mismo estudiantes, ya que se agregaron ciudadanos de distintas condiciones socio económicas. El desenlace de esta marcha en la ciudad de Caracas con saldo de muerte y heridos, dio lugar a reacciones que aún hoy diez días mas tarde se mantienen activas, inflamadas con el combustible de la represión. 
En estos días  se ha observado particularmente un fenómeno relacionado con el sector laboral que exponemos para su análisis. Se trata de convocatorias de sectores laborales en actitud competitiva o casi de provocación a las manifestaciones de origen estudiantil. Una de ellas en Caracas, la convocatoria de una marcha de trabajadores petroleros asociadas con la firma del convenio colectivo petrolero, justo el mismo día de otra masiva convocatoria opositora. Otro caso fue una marcha de trabajadores en Ciudad Guayana, señalando como ruta justamente una que llevaba a transitar, por el mismo lugar en donde desde fecha previa se mantenía una vigilia por parte de estudiantes. 
Las actuaciones del movimiento de los trabajadores en momentos complejos como los que se han observado en estos días días son muy importantes, porque pueden inclinar hacia un lado u otro la puja de poder que un conflicto supone. Además su participación es entendida con los elementos propios de un movimiento popular y civil, es decir con las armas de la razón, la identidad y la movilización. 
Mirando otros momentos críticos de la historia moderna venezolana, en el año 1957 unas reacciones estudiantiles en Caracas en noviembre y en el mismo mes protestas obreras en la zona industrial de La Yaguara, prendieron la mecha para que menos de dos meses más tarde un levantamiento militar completara, junto a una rebelión civil la caída del régimen militar de entonces. 
Lo que estamos viendo en el presente no necesariamente se asemeja a lo señalado en el anterior párrafo. Pero lo que se quiere destacar es el peso e importancia de las protestas tanto estudiantiles como obreras  y de la sociedad civil en general cuando apuntan a un mismo propósito. En el caso que señalamos de estos días, más bien son acciones con componentes confrontativos entre una y otra protesta, es decir más que sumar, son orientadas para restar. Aunque hemos de considerar que las acciones obreras no provienen de un proceso de desenvolvimiento autónomo, ya que el modelo de relación Estado y Movimiento de los Trabajadores es de subordinación a los intereses de aquél.
De nuevo mirando nuestra historia, en la convulsa primera mitad de la década del sesenta, de intensa protesta estudiantil tanto por razones de política interna como externa, la participación obrera a cargo de la conducción de liderazgo laboral estuvo centrada en confrontar con las protestas estudiantiles, al tiempo que los órganos de seguridad y policiales se encargaban de reprimir tanto a líderes estudiantiles como obreros de izquierda. A la larga las protestas estudiantiles fueron derrotadas, y más temprano que tarde parte de su dirigencia optó por el camino de la rebelión y subversión.  
Hay que reconocer que para entonces ya la dirigencia alta y media del movimiento sindical estaba incrustada en posición institucional comprometida en el ejercicio de poder en el país. El modelo de relación movimiento sindical y Estado era el determinante para garantizar un peso favorable del movimiento que encabeza la CTV en las grandes decisiones de política que en el país se tomaban. Se ha hablado de corporativismo para caracterizar la relación que se construyó entre el gobierno y los líderes sindicales afines. En el caso presente, un contraste es el hecho de que el papel de las organizaciones sindicales en la conducción del gobierno es marginal. La política laboral no privilegia que los sindicatos tengan organizaciones vigorosas, con capacidad propia de movilización, sino más bien organizaciones subordinadas a las exigencias de un gobierno con predominio creciente de lo militar, que es equivalente a desconfianza con los movimientos laborales. La ausencia de dialogo no es solo un reclamo que proviene del movimiento de los trabajadores en general y de la sociedad civil sino que también muy particularmente de aquellos sectores diversos que son  afines con el Chavismo.

lunes, 3 de febrero de 2014

LA VIOLENCIA URBANA EL SIGLO XXI.(FEBRERO/2014)

Menos desigualdad, más violencia
La Venezuela de la Revolución Bolivariana constituye una paradoja para los
estudios sobre violencia urbana: si por un lado se observa una mejoría de las
condiciones de vida básicas de la población más vulnerable por la inversión
social estatal, por otro lado la violencia cobra miles de vidas en una tendencia
creciente, precisamente entre estos mismos sectores vulnerables.Las contra-
dicciones se presentan de manera descarnada: hoy mueren menos venezolanos en sus primeros meses de vida; fallecen menos niños y niñas por defi-
ciencias nutricionales;pero muchos niños que son salvaguardados pueden
morir al llegar a la adolescencia y a la juventud en enfrentamientos con sus
pares o con la policía. En Venezuela, el homicidio constituye la primera causa
de muerte para los varones de 15 a 24 años (81% de las víctimas de homicidios
son varones)Y obviamente existe una distribución desigual del riesgo de
morir violentamente dentro de este grupo: la gran mayoría (83%) proviene
de sectores urbanos en precariedad.
Por otro lado, a pesar del esfuerzo invertido en la creación de programas
sociales que atienden las necesidades sociales y económicas particulares de
las mujeres, los niños y las niñas de sectores populares, los jóvenes varones
de los barrios –el grupo mayormente victimizado por la violencia– siguen
siendo los grandes olvidados del proceso bolivariano. Constituyen además,
ante la ausencia de oportunidades, un importante sector implicado en las
posiciones subordinadas de la economía de la droga, lo que prolonga los
cotidianos enfrentamientos armados entre pares y con la policía. De modo
que, en medio de los avances mencionados, las cifras ubican a Venezuela entre los países con mayor violencia en la región junto a El Salvador.Entre 2003 y 2008, el porcentaje de hogares definidos como pobres en Venezuela (de acuerdo
con el método línea de ingreso nacional) ha descendido de 55% a 28% del total de hogares.
La tasa de mortalidad infantil se redujo de 19 por cada 1.000 nacidos vivos en 1999 a 13,9 en
La tasa de mortalidad por deficiencias en la nutrición descendió de 72 a 27 cada 100.000 habitantes entre los niños menores de un año entre 1997 y 2006. Fuente: <www.sisov.mpd.gob.ve/>,
.Ministerio de Poder Popular para la Salud: Anuario de mortalidad, Caracas, ediciones 1997-2008.Según los datos de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de Seguridad Ciudadana, la gran mayoría de las víctimas de homicidio provienen de los dos estratos en mayor
desventaja: 56% del estrato iv y 27% del estrato v. Instituto Nacional de Estadística (ine): Encuesta
Nacional de Victimización y Percepción de Seguridad Ciudadana 2009, ine, Caracas, 2010.
Menos desigualdad, más violencia: la paradoja de Caracas Se trata de una conflictividad expandida en la que resaltan dos dimensiones: por un lado, una dimensión económica e instrumental expresada en la orientación de actores hacia el control de los recursos o actividades económicas clandestinas, como el tráfico de drogas o de armas y el crimen organizado; por otro lado, una dimensión que podría denominarse«geopolítica», manifiesta en la ruptura del vínculo social y en el deterioro de instancias fundamentales de la vida social, como la policía y el sistema de administración de justicia.
Podríamos decir muy rápidamente que una intrincada madeja de procesos
se ha entretejido en nuestra historia contemporánea para configurar esta
violencia, y no es nuestro objetivo central aquí dedicarnos a deshilvanarla.
Solo vale la pena mencionar que, aun cuando se pueden rastrear los oríge-
nes de esta violencia en la urbanización acelerada y las ciudadanías dila-
ceradas de la Venezuela de mediados de siglo xx, en el deterioro sostenido
de las condiciones de vida y la ruptura de la esperanza de una mejor vida. En Venezuela, la tasa de homicidios es de 50 por cada 100.000 habitantes; considérese que en México es de 24 por cada 100.000 habitantes; en Colombia, de 31; en Guatemala, de 38 y en El Salvador, de 69. Ana María Sanjuán: «Seguridad ciudadana en Venezuela», .